En Chiapas se criminaliza a quienes defienden el medio ambiente
Frayba /Desinformémonos
La defensa del bosque, el agua y la vida se contrapone a los intereses económicos de la empresa Bienes Raíces La Moraleja, responsable de la construcción del Fraccionamiento La Moraleja, en San Cristóbal de Las Casas, Chiapas, México. Por lo cual el sistema de procuración de justicia dictamina y mantiene vigentes órdenes de aprehensión que criminalizan y judicializan a quienes integran el movimiento socioambiental de la Colonia Maya. En riesgo la libertad de 2 defensoras, 4 defensores, así como la integridad y seguridad de vecinas y vecinos que mantienen la resistencia no violenta ecológica en la apuestan por el Lekil Kuxlejal (Vida Digna) de los pueblos.
El 07 de septiembre de 2012 autoridades municipales autorizaron el cambio de uso de suelo de una zona contemplada como conservación ecológica, en el sur de la ciudad de San Cristóbal de Las Casas, Chiapas, México. El permiso autorizó la construcción del Fraccionamiento La Moraleja, obra de la empresa Bienes Raíces La Moraleja, propiedad del señor Juan Óscar Liévano Narváez. El proyecto contemplaba edificar 200 casas en un terreno de bosque de encino, en una superficie total de 5 hectáreas.
Para la construcción del fraccionamiento, la empresa Bienes Raíces La Moraleja destruyó árboles y removió la tierra, lo cual ocasionó daños que pusieron en peligro de inundación a calles, casas y escuelas de la Colonia Maya. El 30 y 31 de agosto de 2015, se colapsaron dos bardas que colindaban con una escuela primaria y un kinder, lo que significó un riesgo a la vida de niñas y niños. El 05 de junio de 2016, se derrumbó un fragmento de barda de más de 30 metros que afectó a 20 familias.