Autoridades me imponen el exilio, dice Nestora Salgado a 20 meses de su liberación
Por Redacción/Animal Político
A un año y ocho meses de haber sido absuelta de los delitos de secuestro, robo, homicidio y delincuencia organizada, la activista guerrerense Nestora Salgado (excomandante de la Policía Comunitaria de Olinalá) se mantiene exiliada en Estados Unidos, ante la amenaza de volver a prisión en México, luego de que las autoridades estatales impugnaran los fallos judiciales mediante los cuales obtuvo la libertad.
“Ya lo reconocieron los jueces, que no hubo ningún delito –denunció Salgado–, pero la Fiscalía General de Guerrero ha apelado todas las sentencias favorables. Insiste en que yo solita secuestré a 60 personas, y que pedí 3 mil pesos de rescate a las supuestas víctimas, que maté a un señor. Pero a casi cuatro años, no han podido presentar una sola de esos supuestas víctimas. Y aún así, todos los procesos siguen abiertos, yo sigo en proceso.”
En el año 2012, la población de Olinalá decidió expulsar a los agentes oficiales de la policía municipal asentados en la localidad, luego de que permitieron la fuga de un presunto sicario. Tras conformar una nueva policía comunitaria, en asamblea popular se eligió a Nestora como su comandante.
Un año después, en agosto de 2013, un convoy del Ejército emboscó a Nestora en un Oxxo, la arrestó y en su contra se inició un proceso penal que la mantuvo dos años y siete meses privada de la libertad.
Finalmente, en marzo de 2016, Nestora fue absuelta y excarcelada, al determinarse que no había pruebas en su contra. Sin embargo, las autoridades “primero me dijeron que por cuestiones de seguridad no podía estar en México, que me podían matar, y eso me sonó a mí como una amenaza, así que volví con mi familia, que ya tiene una vida en Estados Unidos. Y luego empezó el gobierno a presentar las apelaciones contra mi liberación”.
Se trata, explica, de una estrategia “para mantenerme fuera de México”, porque a un año y ocho meses de la liberación, el mismo proceso de apelación se mantiene paralizado por decisión de las mismas autoridades que lo promovieron.
“El Ministerio Público impugnó mi liberación, pero hasta la fecha no se ha dado ni siquiera la primera audiencia de esa apelación, porque ya que se había fijado la fecha, el mismo MP la canceló. Entonces, mi más anhelado sueño es regresar a México, porque hay mucho trabajo qué hacer, pero para mí es importante que esto, el proceso penal, termine primero, porque es un martirio: es un desgaste económico, físico y emocional, el estar siempre pensando que cualquier día pueden volverme a meter a la cárcel, por algo que yo no hice. Entonces, así es como me mantienen alejada, me quieren paralizar, controlar.”