Mujer halla a su hijo entre los cadáveres de Jalisco
Redacción / Milenio
María del Tránsito Zamora carga sobre su espalda dos penas: el asesinato de su hijo José Guadalupe Cruz Zamora, el único de los 322 cuerpos identificados que permanecen en conservación en dos tráileres refrigerados y la desaparición de su nieto Daniel Alejandro Cruz, de 18 años.
El pasado sábado 21 de septiembre, María depositó los restos de su hijo en la gaveta identificada con el número 1 del panteón de Guadalajara.
Al pie de la tumba, María le juró a José Guadalupe que encontraría a su hijo. José Guadalupe Cruz Zamora y su hijo Daniel Alejandro Macías desaparecieron juntos la mañana del pasado 20 de mayo, en el municipio de El Salto.
“La última llamada que me dio fue el domingo 20 a las 9 de la mañana porque yo estaba enferma, me dijo ‘mañana voy a ir para llevarte con el doctor’, y me dijo ‘dame tu bendición’”, narró María.
Diecisiete días después de la desaparición de José y Daniel, se enteró del hallazgo de una fosa clandestina en la colonia Lomas del Aeropuerto, en El Salto. “Cuando salió lo de la fosa fue cuando mi corazón me decía que eran ellos, me fui al Semefo, pero me dijeron que todavía no los estudiaban” (a los cuerpos), señaló.