Caso por caso, la forma en que la policía de Javier Duarte desapareció a 15 jóvenes (primera parte)
Por Redacción/Animal Político
Con el argumento de que tenían una “actitud sospechosa”, la policía estatal de Javier Duarte detuvo a 15 jóvenes, que siguen en calidad de desaparecidos.
Sin órdenes de aprehensión de por medio o denuncias. Sin una investigación en curso o trabajo de inteligencia. Sin que se hubiera cometido algún delito en flagrancia, o protagonizado un disturbio. Con el único argumento de tener “una actitud sospechosa”, la policía estatal de Veracruz, en la administración de Javier Duarte, detuvo y desapareció de manera forzada a al menos 15 jóvenes,cuatro de ellos menores de edad, en un periodo de apenas seis meses en 2013.
Ninguno de éstos jóvenes fue llevado ante un juez o agencia del Ministerio Público. De todos ellos no se ha vuelto a conocer su ubicación. Los 15 se encuentran en calidad de desaparecidos.
Una investigación de la Fiscalía General de Justicia del estado, que la semana pasada derivó en la detención y acusación contra 19 exmandos e integrantes de la policía estatal, por el delito de desaparición forzada -entre ellos el exsecretario de Seguridad Pública Arturo Bermúdez -, permite conocer la forma en cómo desapareció cada una de las víctimas.
No eran hechos aislados o circunstanciales, sino una operación perfectamente organizada, en la que participaban dos grupos dentro de la policía estatal, la Fuerza de Reacción y la Fuerza Especial, los cuales actuaban coordinadamente para perpetrar las desapariciones.
En todos los casos, comandos de hasta 14 policías se encargaban de las detenciones, de las cuales existen informes internos de la corporación, en los que se reportaba la captura e identidad de las víctimas.
A partir de la imputación hecha en la audiencia pública, el pasado fin de semana en Veracruz, contra los exmandos y policías detenidos, se describe a continuación cómo es que la policía estatal ejecutó la desaparición de cada una de las víctimas.
Un común denominador: todos habrían sido llevados a una Academia de Policía a las afueras de Xalapa, de donde no se volvió a saber de ellos.
Animal Político te presenta en esta primera parte, de cuatro, la forma en que operaba la Policía Estatal de Javier Duarte, para desaparecer de manera forzada a jóvenes veracruzanos. Los casos se muestran de manera cronológica.
Víctima: Héctor Jesús Hoyos Barradas
Edad al momento de su desaparición: 16 años.
Héctor fue detenido el 6 de abril de 2013, poco antes de las 11 de la mañana, sobre la carretera Xalapa – Perote, en la localidad de El Rosario, municipio de Rafael Lucio, Veracruz.
Elementos de la Fuerza de Reacción, al mando del comandante Manuel Trujillo Rivera, registraron al joven tras considerar que mostraba una “actitud sospechosa” y supuestamente le encontraron un teléfono.
De acuerdo con una tarjeta informativa interna firmada por el referido mando policiaco, dicho teléfono contenía información que hacía “sospechar” que colaboraba con el crimen organizado.
Como respuesta a su tarjeta informativa, Trujillo recibió la orden de poner al menor a “disposición correspondiente”. Lo anterior no significaba llevarlo a una agencia del Ministerio Público (MP), sino entregarlo a elementos del grupo Fuerza Especial de la SSP, una agrupación de élite sin reconocimiento oficial, compuesta en su mayoría por exmilitares y bajo mando directo de Arturo Bermúdez.
La entrega de Héctor se hizo debajo del puente “Las Trancas”, poco después de la medianoche del 7 de abril. Los elementos de la Fuerza Especial llegaron en tres patrullas y se lo llevaron. Desde ese día no se ha vuelto a saber nada sobre el paradero de Héctor.